El ministro de Petróleo del régimen venezolano, Tareck El Assami, presentó nuevas pruebas a la Fiscalía General sobre el caso de los 4.850 millones de dólares en el caso del llamado «megarrobo a Pdvsa», en el que acusan a Rafael Ramírez, expresidente de la estatal petrolera.
En una rueda de prensa informó que por este supuesto delito además de Nervis Villalobos, los hermanos Oberto Anselmi y Leopoldo Alejandro Betancourt, está involucrado el cuñado de Ramírez, Baldo Sansó.
También dijo que las auditorías de los años 2012 y 2013 de la firma KPMG, con la cual el exministro se defiende, supuestamente contienen elementos que lo inculpan.
El Assaimi aseguró que estos documentos señalan como Pdvsa obtuvo ganancias de empresas privadas no financieras.
Según el funcionario rojito, este dinero fue a parar a una cuenta en un banco extranjero de los hermanos Oberto Anselmi, que después se repartió «como un botín», y nombró específicamente a Betancourt.
«Cuando tú generas un financiamiento y pagas de manera anticipada no se genera una ganancia, se genera un descuento o ahorro por el pago de intereses, significa que se evidencia un fraude con la utilización de esos recursos que fueron utilizados para otros objetivos», aseguró El Aissami.
EC / JoParra
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