«ESTOY HORRORIZADO»: Jefe de la ONU condena bombardeo contra hospital en Gaza que dejó unos 500 fallecidos y dice que su «corazón está con las familias de las víctimas»

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), António Guterres, dijo este martes estar «horrorizado por el asesinato de cientos de palestinos civiles» en el hospital Al Ahli de la ciudad de Gaza, en un bombardeo del que se culpan mutuamente Israel y los palestinos y que ha dejado ya al menos 500 muertos, entre ellos muchas mujeres y niños.

Guterres, que no se pronunció sobre la autoría, se expresó así en un tuit: «Mi corazón está con las familias de las víctimas», al tiempo que recordó que «los hospitales y el personal médico están protegidos por el derecho internacional humanitario».

Posteriormente, en un breve comunicado distribuido por su portavoz, condenó igualmente el ataque en el mismo día contra una escuela de la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (Unrwa) del campamento de Al Maghazi en Gaza, en la que fallecieron seis personas.

Recordó que también los edificios de la ONU están «explícitamente protegidos» por la ley humanitaria internacional, y tampoco en el comunicado mencionó a Israel, aunque sobre el ataque a la escuela no caben dudas sobre su autoría.

Distintas agencias de la ONU o altos directivos condenaron a lo largo de la tarde del martes el ataque contra el hospital, convertido ya en el hecho de guerra más grave del conflicto actual entre Israel y el grupo islamista Hamás que gobierna la Franja de Gaza. Israel ha negado ser el autor del bombardeo sobre el hospital, aunque en las últimas horas sus portavoces han ido cambiando de versión sobre la autoría.

En cualquier caso, este ataque ha tenido ya sus consecuencias en la calle, y en las horas nocturnas se sucedieron las manifestaciones antiisraelíes en varias ciudades árabes, que en ocasiones derivaron en ataques contra una embajada israelí (en Amán) o contra un complejo de la ONU (en Beirut).

Además, Jordania canceló en protesta la cumbre que había programado en Amán con los jefes de Estado de Estados Unidos, Egipto y la Autoridad Palestina, y que tenía como fin buscar una salida humanitaria al drama que viven los dos millones de gazatíes desde hace cuatro días.

LB / EFE